Este es uno de los temas sobre arquitectura que me llama mucho la atención, ya que, al fin y al cabo al enfocar nuestra mirada hacia el futuro es una de las principales ideas que se nos viene a la cabeza. Esta reflexión empezó este verano pasado, fue gracias a mi padre y un amigo suyo.
El pasado verano fuimos a visitar a un amigo de mi padre, este amigo suyo es arquitecto y me estuvo enseñando algunos proyectos que estaba haciendo por su cuenta. Un poco más tarde, pasamos un rato hablando y le dije de mi interés por el mundo de la arquitectura, la construcción… pero sin embargo, le dije que no tenía mucha idea de como trabaja un arquitecto, él comenzó a reír dándome a entender que es una de las preguntas más generales que existen. Así que el comenzó a explicarme que existía un amplio abanico de posibilidades, más de las que me podía imaginar, me contaba que podría trabajar para algún arquitecto, podía trabajar por mi cuenta cómo él estaba haciendo en esa ocasión, podía trabajar a pie de obra, podía dedicarme a la docencia, podía convertirme en oficial de bombero con unas oposiciones o en muchos otros cargos del estado, rehabilitación…
Todo lo que me contó dándome ejemplos de gente que conocía me hizo entender que la arquitectura permite tocar todos los palos, es una de las cosas que más me gusta de esta disciplina. Cuando llegué a mi casa, estuve un rato informándome y me di cuenta de que ese abanico del que el me hablaba era aun más extenso.
En relación a todo lo anterior, reflexionando, consigo entender un poco mejor la arquitectura y al arquitecto y darme cuenta de que el mundo de la arquitectura es muy diverso, si nos paramos, observamos y preguntamos a los arquitectos a qué se dedican, nos daremos cuenta de que muy probablemente cada una de las respuestas sea distinta a la misma vez que apasionante.
Por último me gustaría invitar a todo el mundo a interesarse por lo que aman, informarse sobre las posibilidades de las que disponen, tener curiosidad por lo que harán en un futuro… Tras este proceso se darán cuenta de qué es lo que más les gusta, qué es lo que más les llama la atención. Muchas veces hacemos cosas sin pensarlas, pero de vez en cuando debemos pararnos a reflexionar y preguntarnos el motivo por el cual hacemos las cosas.